Durante el verano las temperaturas aumentan de manera drástica, y estas se acentúan durante el mes de julio. Eso puede afectar a nuestra vida cuotidiana y a nuestra salud.
Es por eso que tenemos que prestar atención para evitar deshidrataciones y golpes de calor. Ya que estos pueden suceder dentro y fuera de casa.
Por otra parte, el calor afecta más a colectivos como personas de la tercera edad. Por eso es importante seguir estas recomendaciones, además que ayudarán a final de mes.
1. Beber mucha agua y mantenerse hidratado
Aunque de primeras parezca lógico para sobrevivir al calor, el agua es uno de los elementos que nos ayudará más en estos días de bochorno. También es indispensable para hidratarse y evitar dolores de cabeza provocados por la alta temperatura.
2. Evitar ducharse con agua fría
El contraste con el agua fría en la ducha puede ser contraproducente. Ya que con eso lo que logramos es que el organismo se prepare para aumentar la temperatura corporal y así no perder el calor. Es recomendable ducharse con agua tibia.
3. Ropa ligera y transpirable
Llevar ropa ligera y ancha nos ayuda cuando el calor viene acompañado de una suave brisa. Este tipo de ropa ayuda al cuerpo a estar más fresco. Seguro que habéis comprobado que cuando lleváis roba estrecha el cuerpo suda más.
4. Mojar las muñecas en agua fría
Solo 10 segundos debajo del agua fría, ya serán suficientes para ayudar al organismo a bajar la temperatura corporal. Eso ayudará a tener una sensación de frescor por todo el cuerpo que nos durará más o menos una hora. También mojar la nuca es otra fórmula para conseguir el mismo efecto.
5. Uso de electrodomésticos nocturnos
Todos los aparatos electrónicos son una fuente de calor. Se aconseja que los electrodomésticos como la lavadora o el lavavajillas sean utilizados por la noche. Además, es una forma para ahorrarse algún dinero en la factura de la luz.
6. Tapas para cocinar
La ebullición que se provoca cocinando da como resultado calor y vapor. Una de las acciones que se recomienda es poner tapas en las ollas y sartenes a la hora de cocinar. De esta forma el calor se queda concentrada en la misma olla. Si tu intención es freír, es importante encender el extractor y mantener la puerta de la cocina cerrada.
7. Comida ligera
Es importante consumir alimentos frescos y ricos en vitaminas y minerales, eso nos ayuda a combatir el calor y a mantenernos hidratados. Una dieta con frutas y verduras es lo mejor para el verano.
8. No abusar de bebidas con cafeína, alcohol o azúcar
Este tipo de bebidas muchas veces hacen la acción contraria a la deseada. El consumo de helados, cerveza, refrescos o café helado producen la activación de la perdida de líquido corporal y en algunos casos aumentan el calor.
9. Vaporizador de agua siempre en mano
Tener un espray con agua fría y mantenerlo en la nevera, es una de las técnicas para refrescarse más eficientes. Lo podemos usar tanto fuera como dentro de casa.
10. Dormir fresco
Dormir bien y las horas necesarias es muy importante. Durante el verano es una tarea complicada, ya que el calor es un componente que muchas veces entorpece esta acción. Es por eso que es recomendable refrescar la cama antes de ir a dormir. Al igual que en invierno, se pueden usar bolsas de agua fría o poner los cojines en el congelador unos minutos.
Aunque el verano sea una estación con temperaturas difíciles, es una época donde también se disfruta mucho del buen tiempo y de todas las actividades que este ofrece. Esperamos que estas recomendaciones sean de ayuda para combatir el calor y que este verano sea inolvidable.
